Fuentes de la localidad detallaron que los militares
y personal de la Administración Civil de Israel comenzaron a desmontar las
caravanas a las 05:00 hora local, evacuando a las familias que las habitaban,
que incluyen a una mayoría de niños.
Además de las ocho estructuras demolidas en las primeras horas de hoy, explicó
Atallah Mazaraa, representante de Jabal al-Baba, los israelíes prosiguieron a
derribar otras propiedades similares, cada una de las cuales tiene un área de
unos 80 metros cuadrados.
Un comunicado emitido por la Coordinadora -israelí- de Actividades
Gubernamentales en los Territorios (Cogat) sostiene que se actuó en contra de «casas
móviles y estructuras construidas ilegalmente en los últimos días».
Esa entidad sostiene que le brinda en una localidad cercana «alternativas
legales a los beduinos palestinos residentes en edificaciones ilegales».
No obstante, para Jad Issac, investigador del Centro de Estudios Aplicados de
Jerusalén, la propuesta de relocalización persigue realmente dejar al Gran
Jerusalén sin habitantes palestinos para hacerle espacio a un futuro
asentamiento israelí ilegal.
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Retomado de Al-Manar