La gestión de los asuntos de un grupo se basa en la interacción de dos categorías de personas; los que dan instrucciones y dirigen y los que obedecen y ejecutan.
Las palabras relacionadas con la obediencia se usan 129 veces en el Sagrado Corán, ya que algunas de las referencias están relacionadas con la gestión. El versículo 19 de Sura Al-Alaq dice:
“(Muhammad),¡No! No lo obedezcas, sino que prostérnate [ante Dios] y busca Su proximidad.” Este versículo pide a los subordinados que no obedezcan. Esto muestra que el Corán considera un lugar especial para los subordinados e incluso les permite no obedecer a un gerente incompetente.
Si obedecemos a un mayordomo injusto y rebelde, eventualmente llegaremos a ser como él; por eso el Corán insiste en obedecer a un administrador digno y justo. El Sagrado Corán dice que no debes obedecer a un administrador que bloquea tu acceso al camino de Dios.
Tengan temor de Dios tanto como puedan. Escuchen, obedezcan y gasten [en el camino de Allah]; es mejor para ti mismo. Sepan que quienes luchen contra su propia avaricia serán los triunfadores. (at-Tagabon 16)
Hasta que haya una interacción adecuada entre los gerentes y los de abajo, la gestión no será eficaz.