Cómo el racismo socava la religiosidad

IQNA – La gente recurre a distorsionar y falsificar la verdad por diferentes razones, una de las cuales es el racismo y el etnicismo.

Una rama del racismo es el nacionalismo en su forma extremista. Los racistas y nacionalistas en ocasiones han impuesto sus puntos de vista al Islam y han provocado la distorsión del pensamiento islámico. Por ejemplo, algunos nacionalistas sostienen que el Islam es una manifestación de la nacionalidad árabe.

 

Incluso desconcertaron el Hadiz después de la muerte del Santo Profeta (P) para promover una visión tan distorsionada.

 

Otro ejemplo son los judíos que distorsionaron los hechos para demostrar su superioridad sobre los demás.

 

Después de Moisés (P), durante siglos los eruditos judíos distorsionaron la Torá basándose en su deseo de mantener su influencia y poder.

 

Según un pensador, la palabra Tahreef (distorsión) se usa en el Corán especialmente para los judíos que son los campeones de la mistificación no sólo hoy sino desde el principio.

 

Era una costumbre que los judíos pagaran a los eruditos judíos para que les informaran sobre las características del último mensajero de Dios (el Profeta Muhammad (pbd)).

 

Sin embargo, cuando Muhammad (pbd) fue nombrado profeta y se dieron cuenta de que era el último profeta de Dios, temieron que si decían la verdad, los judíos comenzarían a abrazar el Islam y los eruditos perderían el dinero que recibían anualmente. Así que distorsionaron la Torá y cambiaron las características mencionadas sobre el último mensajero, desviando así a los judíos.

 

En el Sagrado Corán, Dios revela esta característica de los judíos:

 

Algunos judíos alteran el sentido de las palabras y dicen: «Oímos y desobedecemos... ¡Escucha, sin que se pueda oír! ¡Raina!», trabucando con sus lenguas y atacando la Religión. Si dijeran: «Oímos y obedecemos...¡Escucha! ¡Unzurna!», sería mejor para ellos y más correcto. Pero Alá les ha maldecido por su incredulidad. Creen, pero poco.  (Verso 46 de la Sura An-Nisa)