Si los musulmanes estuvieran unidos, ningún poder se atrevería a atacar a las naciones islámicas oprimidas, afirmó el Ayatolá Seyed Kazem Nourmofidi, representante del Líder en la provincia de Golestán, durante una reunión con los asesores de la Secretaría del Consejo de Planificación de las Escuelas Religiosas Suníes de Irán.
Elogió las acciones de la Secretaría en el nombramiento de asesores y su atención hacia las élites suníes, destacando la necesidad de preservar y fortalecer la unidad islámica.
“Desde los primeros días en que asumí esta responsabilidad, he hecho de la unidad la base de mis actividades, y creo que el camino para alcanzarla es la aceptación mutua, el respeto y la honestidad.”
Señaló que la unidad islámica no es simplemente un lema político, sino que tiene sus raíces en el Corán, donde Dios dice: “Y aferraos todos juntos a la cuerda de Alá y no os dividáis.” (Versículo 103 de la Surah Al Imran)
Criticando algunos comportamientos divisivos, el Ayatolá Nourmofidi añadió: “El Corán y la razón nos llaman al respeto mutuo y nos exhortan a evitar insultar las cosas sagradas. Si la Ummah islámica estuviera unida, los enemigos de hoy no se atreverían a comportarse de esta manera con el pueblo de Palestina y Gaza. Por esta razón, el tema de la unidad es para mí más obligatorio que la oración (Salah); porque la oración es un deber individual, pero la unidad se considera una responsabilidad general de la Ummah islámica.”
Al referirse a los esfuerzos de los enemigos por socavar las creencias islámicas a través de los medios de comunicación y herramientas de poder, afirmó que la única forma de enfrentar estas amenazas es fortalecer la unidad, la tolerancia y el entendimiento mutuo entre las escuelas islámicas.