Moisés usó súplicas en el camino de la profecía
Por eso es importante estudiar los métodos educativos que utilizaron. Uno de esos métodos es el uso de súplicas.
La súplica es una petición humilde de Dios, como una oración La súplica y la oración existen en diferentes formas en todas las naciones y religiones.
El punto más importante de la súplica es que es una declaración de necesidad y dependencia de Dios, el Todopoderoso.
Además, Dios mismo ha ordenado a los humanos orar y recitar súplicas.
Moisés (p), quien fue un gran mensajero de Dios, usó el método de la súplica para guiar a la gente. Aquí hay dos puntos sobre sus súplicas:
1- Cortesía en la súplica
Moisés (p) decidió ir a Madián, que estaba fuera del territorio gobernado por el faraón. Después de un largo viaje, llegó a Madián y vio allí a las hijas del Profeta Shuaib (p). Sacó agua del pozo para las muchachas y abrevó su rebaño. Hambriento y cansado, se acostó bajo la sombra de un árbol y oró:
Entonces [Moisés] abrevó al rebaño por ellas, y al terminar se retiró a la sombra y exclamó: "¡Señor mío! Realmente necesito cualquier gracia que me concedas". (Versículo 24 de Surah Al-Qasas)
Aunque estaba cansado y hambriento, no conocía a nadie en esa ciudad y no tenía refugio, no actuó con impaciencia sino que solo habló de lo que necesitaba y esperó el favor de Dios.
2- Súplica antes de emprender la misión
Cuando Moisés (p) se enteró del significado de su misión, oró a Dios y le pidió algunas cosas para poder cumplir bien su misión.
Una de las cosas que pidió fue “expansión del pecho(corazón,ánimo)”.
"Dijo [Moisés]: «¡Señor mío! Ensancha mi pecho'”. (Verso 25 de la Surah Taha)
Pidiendo la expansión de su pecho, pidió a Dios que llene su corazón de la valentía que le permita cumplir con las obligaciones asociadas a la gran misión de un mensajero, y que le dé tolerancia, constancia y paciencia.
Por lo tanto, se pueden aprender lecciones de estos dos puntos en las súplicas de Moisés (p).
Primero, es importante pedirle a Dios con humildad las cosas que desea y no actuar como si Dios le debiera algo a la gente.
Otro punto es que uno debe saber que antes de emprender cualquier misión, uno debe prepararse mental y espiritualmente y llegar al más alto nivel de preparación para esa tarea, incluso rogándole a Dios que le dé ese nivel de preparación.
