La ciudad de Qom acogió la semana pasada una conferencia dedicada al centenario de la refundación de su famoso seminario islámico.
Hace cien años, tras un periodo de relativa marginación, el Gran Ayatolá Abd ol-Karim Haeri Yazdi dio nueva vida al antiguo seminario de la ciudad, que ya contaba con más de mil años de historia.
El seminario de Qom es hoy el mayor centro de estudios islámicos del mundo chií. En la segunda mitad del siglo XX, se convirtió en un foco de desarrollo intelectual y espiritual que influyó profundamente no solo en el mundo islámico, sino también más allá de sus fronteras.
En Qom se formaron algunas de las figuras más influyentes del islam del siglo XX, entre ellas el Imam Musa Sadr y el Imam Ruhollah Jomeiní.
Este último fue responsable de la reelaboración del concepto de Wilayat al-Faqih y de la formulación de la posibilidad de un gobierno islámico guiado por eruditos religiosos también en la era moderna, abriendo así una vía para el mundo islámico que no era ni la liberal-democrática occidental ni tampoco la socialista del bloque oriental. Una vía no solo política, sino más ampliamente cultural y civilizatoria.